Observando el paisaje {Matthew Ashdown}

Era otro de esos días aburridos en Hogwarts sin nada que hacer. No sabía si era el Colegio o mi forma de ser, pero había días en los que todo era diversión, distracción, gente hablando de un lado para otro... Y, por el contrario, otros días transcurrían lentamente, el castillo estaba vacío, los alumnos iban de la Sala Común a las clases y de las clases a la Biblioteca. Era todo tan aburrido...

Pero yo me negaba a pisar la Biblioteca. Sólo estudiaba cuando se acercaban los exámenes, y estudiaba mejor en mi cuarto que en una Biblioteca llena de alumnos chismosos, así que mientras todos los alumnos estaban rodeados de libros en estos momentos, yo había decidido irme a descansar a la Torre de Astronomía.

Tenía un poco de vértigo. Bueno, mucho vértigo. Pero allí se estaba realmente bien: El aire dándote en la cara, las vistas... Y merecía la pena superar el vértigo para poder contemplarlo todo. Me acerqué a la barandilla y me senté en el suelo, observando el paisaje tras los barrotes de ésta. Saqué mi paquete de tabaco y me puse a fumar tranquilamente.

─Ay, qué aburrimiento... ─me quejé. Suspiré después─ Tengo ganas de una fiesta... ─todo esto lo iba murmurando, sin importarme que nadie me escuchara porque, en fin, no había nadie.

Me pareció oír unos pasos y me quedé quieta. Una parte de mí pensaba en que quizá el ruido se debía al viento que hacía a semejante altura, pero la otra estaba alerta por si se acercaba alguien.
Sin embargo, tuve que reconocer que no estaba lo suficientemente alerta, pues la voz de un chico me sobresaltó. Pegué un leve brinco, estando sentada, y me giré para ver de quién se trataba: Era un chico de mi casa, de Slytherin, que me sonaba bastante, pero que extrañamente nunca había hablado con él.

Cuando dijo lo de la fiesta sonreí tímidamente, pues eso significaba que me había escuchado, pero en vez de dejarme avergonzar por aquel hecho preferí contestarle lo mejor que pude:
─Sí, sí... Una fiesta... ¡El castillo está muerto! ¿Qué le está pasando a la gente? ─contesté, con una voz algo chillona de lo alterada que me encontraba, y después suspiré resignándome─ Bueno... No importa. Soy Gabrielle Sway ─me presenté sonriendo levemente y alzando mi mano para que me la estrechase─ ¿Y tú eres...? ─me sonaba que el chico se llamaba Matt, Matthew... Algo así le decían... Pero no quería resultar muy entrometida.